jueves, 26 de agosto de 2010

Un apasionado del rally





Neuquén > El rally regional sufrió otro duro golpe. A pocos meses de la muerte de Jorge Angeloni, en forma trágica, ayer la desgracia recayó sobre Pablo Cacopardo.Este vez no fue la competencia la emboscada fatal, como ocurrió con el piloto de Cutral Co, sino las siempre peligrosas rutas de nuestro país, una trampa mortal que día a día se cobra la vida de miles de personas. Ayer lo sufrió Cacopardo cuya partida accidental dejará un gran vacío no sólo en el Rally Regional sino a nivel nacional, donde supo forjarse un nombre entre las figuras que animan las competencias por diferentes puntos del país. Pablo tenía 39 años y era un piloto con experiencia en las lides del rally, ya que había debutado hace algunas temporadas atrás. En su juventud compitió en karting y luego se desplazó al TC del Sur, pero rápidamente se dio cuenta de que la tierra la tiraba más y así se metió en el Regional de Rally.En su primera temporada en 2003, y con un Renault 18 de la A7, Cacopardo, ya con el “Chaca” Montero como navegante, lograron el subcampeonato dentro de la clase. Suficiente para tomar impulso y embarcarse a nivel nacional. Su primera temporada en el Rally Argentino fue en 2006, y otra vez demostraron todo su potencial logrando el título en su primer año en la N3, con un Renault Clio atendido por Oscar Millán.En 2007 pegaron el salto a la Súper R, en donde el allense tuvo su primera experiencia con un auto de clase integral con buenos resultados, aunque no pudo completar la temporada ni tampoco comenzar la siguiente. En 2009 tampoco compitió y su regreso a las rutas se produjo esta temporada de la mano del equipo Patagonia Desarrollos Especiales, y dentro de la N4 Light, donde ya había logrado su primera victoria en el Rally de Cutral Co y Plaza Huincul, en al cuarta fecha.Cacopardo y Montero corrieron hace poco más de dos semanas la Vuelta de la Manzana que quiso el destino fuera la última carrera. En esa oportunidad terminaron en la segunda posición en la N-4 Light y el binomio peleaba el campeonato.Tras un parate de casi tres años en el que se había volcado a otras actividades como el esquí acuático y el buceo, Cacopardo se metíó este año otra vez por los caminos del rally con esa pasión que siempre tuvo por la velocidad y que ayer se apagó con idéntico vértigo