miércoles, 22 de diciembre de 2010

CRÓNICA DE UN FINAL ANUNCIADO




Era algo que se veía venir. Rogger Morales dejó de ser el técnico de Independiente y el panorama para el "rojo" asoma más que complicado para el 2011 ya que el equipo se encuentro en zona de descenso directo. Fueron varios los argumentos pero el más significativo tiene que ver con la salida del empresario Néstor Saúl Obreque del grupo de apoyo. Habrá que ver la situación de algunos jugadores que esgrimieron que se irían en caso que Rogger no siga. Para sucederlo suena el nombre de Omar "Papi" Dehais.

El entrenador y el presidente de la entidad Gastón Sobisch debían reunirse el jueves, pero la cumbre fue postergada para la tarde de ayer. Sin embargo, el DT decidió no presentarse y mantener la decisión que había anticipado días atrás.
Sobisch confirmó la salida de Morales, aunque aclaró que los motivos de su renuncia "hay que preguntárselos a él, prefiero que sea él que lo explique".
El entrenador se lo comunicó en horas de la mañana al propio presidente, pero en un nuevo intento de convencerlo acordaron otra cita. Pese a todo, el dirigente y el ex volante central de Huracán acordaron mantener una reunión más, la cual se daría antes del lunes.
"Nos tomó por sorpresa, recién estamos acomodándonos y sinceramente aún no pensamos alternativas y queremos reunirnos nuevamente", sostuvo Sobisch. "Consideramos que hay gente muy valiosa en el club y también en el Alto Valle", agregó el dirigente.
En cuanto al balance en el aspecto deportivo, el titular del Rojo se mostró conforme con lo hecho por el DT. "El equipo no ligó, tuvo muy buenos partidos y hoy deberíamos tener seis u ocho puntos más y por eso habíamos apostado a darle continuidad al proceso de Rogger", comentó el titular Rojo.
En cuanto al armado del plantel para el Clausura, Sobisch adelantó que aún no hay nombres y todo dependerá de quién sea el técnico. Aunque confirmó que hubo charlas con Orlando Porra, reconoció que el interés de Cipolletti complica su retorno.