La escudería Ferrari atacó a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) por haber apoyado a los equipos novatos, USF1 y Campos Meta, que aún no están listos para encarar su temporada debut en la Fórmula 1.
Los italianos dispararon contra el ex presidente Max Mosley. También se refirió al futuro trunco del argentino José M. López.
La escuderíase refirió, a través de una columna en su página web, a los coqueteos de la FIA con los equipos USF1 y Campos Meta, que aún no tienen sus autos listos y afrontan un futuro incierto.
El comunicado subraya que "de los 13 equipos que firmaron para el 2010, hasta la fecha sólo once cumplieron los plazos".
"El equipo 13 (por USF1) parece haber pasado a la clandestinidad en Charlotte, para consternación del argentino López, quien pensó que había encontrado su camino en los boxes de la Fórmula 1, con la ayuda de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner) y ahora tiene que empezar todo de nuevo".
También aludió al Campos Meta, asegurando que "sus accionistas y la estructura de gestión se trasnformaron a través de un aporte de liquidez repentina de un caballero blanco generoso, muy acostumbrado a este tipo de maniobras. El retorno del apellido Senna a la F-1 ni siquiera se pudo ver en una sesión de pruebas".
Ferrari también deja claro su opinión acerca el Stefan GP. "Luego, tenemos los buitres de Serbia", definió la columna. "En primer lugar, se lanzaron a una batalla legal con la FIA, y luego recogieron los huesos de Toyota en su lecho de muerte", aseguró.
