Las caras de Boca lo dicen todo. Morel, Krupo, Medel y Marino se fueron sin hablar. No era para menos...
Boca sigue sin reconciliarse con su gente ni con su juego. Anoche recibió la peor goleada de la historia en Mar del Plata y evidenció los mismos problemas que lo llevaron a cerrar un pobre 2009. Y el miércoles se viene el Superclásico...
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No la tendrá fácil Basile si es que quiere devolverle el protagonismo a un Boca que comenzó el 2010 en sintonía con lo que fue un 2009 para el olvido. Es que su equipo evidenció una vez más las necesidades de refuerzos y fue goleado por Estudiantes. Sin Riquelme (aún se recupera físicamente), con Palermo descansando y un solo refuerzo en la lisa (Matías Giménez) el Xeneize no puede torcer el rumbo. La defensa sigue teniendo los mismos problemas del año pasado, anoche la inclusión del pibe García en el arco no le devolvió la seguridad y encima sufrió la peor goleada de la historia de los torneos veraniegos. Sí, tal vez este dato no tenga el peso de un partido oficial, pero está claro que los tiempos para el Coco se acortan y el Superclásico del próximo miércoles puede empezar a definir cosas en un Boca que tendrá la obligación más que nunca, de salir campeón del Clausura, el único torneo que disputará en el primer semestre.
Boca tuvo su primera participación oficial en los campeonatos de verano en la Costa Atlántica el 23 de enero de 1968. Aquella vez el equipo dirigido por José D'Amico le ganó por 1 a 0 a Peñarol con gol de Ovide. Desde entonces el Xeneize participó en cada verano de los diferentes campeonatos y en los distintos formatos en los que se jugó. Desde la famosa Copa de Oro, pasando por la Copa del Atlántico y los duelos picantes con River, Boca acompañó el verano marplatense con partidos memorables. En esa historia, no se encuentra un resultado como el de anoche ante Estudiantes. Sí, es la primera vez que Boca recibe cuatro goles en los tradicionales campeonatos de verano jugado en la Feliz. La única vez que el Xeneize había sido cacheteado de manera tan categórica, fue ante un combinado marplatense en 1945. En aquella oportunidad el equipo que dirigía Alfredo Garasini cayó por 6 a 2, pero el partido ni siquiera puede considerarse en un torneo de verano, ya que el rival fue un combinado de la ciudad Feliz.
Tanto fue el dolor que le causó al ceno del plantel Xeneize la derrota de anoche, que para encontrar una goleada semejante de Boca en un partido amistoso, hay que remontarse al año 2000. El 16 de agosto el equipo de Bianchi recibió cinco goles (el partido terminó 5-3) en el Madrigal, cuando jugó un amistoso con Villarreal. Desde esa fecha hasta la actualidad, a Boca nunca le marcaron más de tres goles. El dato toma más fuerza aún si tenemos en cuenta los últimos 25 años de Boca jugando partidos amistosos. En todos esos años, sólo dos veces recibió más de tres goles: el primero fue el 21 de abril de 1985, cuando Guaraní Antonio Franco lo goleó por 6 a 0. Ese partido fue recordado por la violencia con la que se jugó y porque Boca terminó con nueve hombres, cuando Pasucci se retiró del campo disconforme con el arbitraje. El otro de los encuentros en los que Boca fue goleado, es el mencionado en España y ante el Villarreal.
Los partidos de verano suelen ser simples encuentros preparatorios para la mayoría de los equipos. Sin embargo para Boca cualquier traspié genera temblores. El miércoles tendrá un nuevo Superclásic. La obligación de ganar crece y los tiempos se acortan...
