martes, 8 de marzo de 2011

Del semillero a un rol protagónico




Manuel Gutiérrez y Henry Sáez son grandes responsables de la levantada matemática y deportiva de Cipolletti.

El delantero lleva marcados 5 goles en el 2011 y el volante le dio un toque distinto al sector medio en los últimos compromisos.

Cipolletti > Al borde del abismo futbolístico llegó a estar Cipolletti. Tras la derrota en Lincoln contra Rivadavia el domingo 27 de febrero, el equipo dirigido por Lorenzo Frutos quedó último, debiendo enfrentarse en La Visera a Villa Mitre. En menos de una semana todo cambió para el Albinegro. En la victoria ante el Tricolor, cuatro goles y un fútbol fluido despertaron la ilusión, sobre todo después del éxito consecutivo el domingo ante Huracán de Tres Arroyos, de la mano de dos jugadores formados en el club, con historias parecidas e idénticas dificultades para mostrarse con la camiseta de sus amores.
Manuel Gutiérrez ha sido quien más ha penado en este sentido. Material de recambio durante años para Domingo Perilli, se marchó cuando llegó Marcelo Yorno a Independiente de Neuquén, donde jugó poco y lejos del mejor nivel.
A Frutos nunca le disgustó, pero las 4 plazas del verano no contemplaban el nombre del Estu, sino el del brasilero Robson, quien tuvo que despedirse sin siquiera entrenar una vez.
Henry Sáez sufrió las mismas vicisitudes para calzarse la “9”. Pisó la capital neuquina para encontrar su mejor versión en el Rojo (no resultó), volvió a la Liga Confluencia con la camiseta de Fernández Oro (se lesionó mucho y jugó muy poco) y cuando parecía que el último vagón de su tren se escapaba aceptó el reto de irse a jugar a Catriel.
Con los Petroleros explotó, marcó 27 goles en el último Clausura doméstico y estableció un récord de efectividad para los torneos cortos. Al asumir, Frutos lo pidió, abrió las puertas para su regreso cuando todos los zonales andaban tras sus pasos y relegó a Ezequiel Petti, que terminó emigrando a Alvarado de Mar del Plata.
Le llevó cuatro partidos encontrar su primer grito en la vuelta. Fue en Pergamino, contra Douglas Haig, cuando ya había dejado de ser titular. Con el del último domingo ante Huracán suma cinco gritos sagrados en la cuenta personal, es uno de los máximos anotadores del 2011 en la divisional y otra de las claves en la levantada.

Lo que les queda hasta el final
Hay cuatro equipos para una sola plaza de clasificación en la Zona 1 del torneo Argentino A. Entre Douglas Haig (33 puntos), Huracán de Tres Arroyos (33), Cipolletti (31) y Rivadavia (30) saldrá el compañero de Brown de Madryn y Unión de Mar del Plata para el grupo Campeonato.
El Albinegro visita el fin de semana a los marplatenses en el Mundialista y cierra la fase en casa ante Douglas, pero ¿qué le queda al resto de sus rivales en este desenlace apasionante?
Los de Pergamino, previo viaje al Alto Valle, buscarán ganar en casa contra Rivadavia, equipo de Lincoln que en la última será anfitrión de Brown.
Para el Globo de Tres Arroyos, el fin de semana será tiempo de volver a casa contra Villa Mitre y culminará, también en su cancha, ante Unión.
Para el Capataz, el primer desafío es sumar los 6 puntos que restan y aguardar porque Huracán no obtenga el 100 por ciento de eficacia en las dos últimas.
Además de los clasificados por este grupo, ya se han asegurado un lugar entre los 9 que irán por el ascenso directo Sportivo Belgrano de San Francisco y Talleres, ambos de la provincia de Córdoba
DLMN